OEA encuentra una Bolivia debilitada

Bolivia, como anfitriona de la 42ª Asamblea General de la OEA, llega con una posición negociadora muy debilitada en los principales puntos de la agenda, a tal grado, que el principal tema para el país el “Informe del Problema Marítimo de Bolivia” se encuentra en el número 77, siendo 85 la totalidad de temas que se abordarán en esta Asamblea General. Recién el 1 de marzo de 2012, el Gobierno del Presidente Evo Morales solicitó la inclusión del tema en la Agenda. Argentina logró que el tema fundamental de su política exterior “La Cuestión de las Islas Malvinas” sea inscrito en el punto 9º de la Agenda, antes de la adopción de la Carta Social de las Américas (10º Tema), mientras que el país anfitrión, Bolivia apenas pudo lograr que se anote el Problema Marítimo entre los últimos. No es solo eso, sino que la cuestión más importante para el Presidente Evo Morales, como Presidente de las 6 Federaciones de Cocaleros del Trópico de Cochabamba “La Defensa Internacional de la Hoja de Coca”, está en el número 84 de la Agenda, es decir el penúltimo punto a tratarse, siendo “El Agua como Derecho Humano” el último de la lista. Cabe recordar que Bolivia fue el país impulsor en las Naciones Unidas para que se apruebe el acceso al agua como derecho humano. No solo la posición de los temas más importantes para Bolivia ocupan los últimos lugares en la Agenda, sino también en lo sustantivo de los temas Bolivia tiene una posición muy débil. El tema central de la Asamblea General de la OEA es la seguridad alimentaria, pues bien veamos cómo estamos por casa. Bolivia consume cada día más alimentos del extranjero, la producción nacional va disminuyendo cada año que pasa, basta de muestra un botón, las papas que come la población boliviana cada día son menos nacionales y más importadas, en las ciudades de La Paz y El Alto, más del 50% de estos tubérculos provienen del Perú. Al respecto, se debe recordar, que la papa es originaria de las orillas del Lago Titicaca y que la productividad en este cultivo es muy baja, 6 toneladas por hectárea, mientras que nuestros vecinos duplican esa producción, Perú 12,6 toneladas por hectárea, Chile 15,2 toneladas por hectárea, Brasil 23,7 toneladas por hectárea y Argentina 28,7 toneladas por hectárea. El año 2005, Bolivia importaba 225 millones de dólares en alimentos, mientras que el año 2011 esa importación aumentó a 564 millones de dólares, un 150% superior. Estos datos se refieren solo a las importaciones legales, no al contrabando, que con toda certeza duplican las estadísticas oficiales. Por lo tanto, qué puede decir el Gobierno del Presidente Evo Morales sobre este tema, si en los seis años de su gestión, la inseguridad alimentaria se incrementó, ahora la población boliviana depende más de alimentos extranjeros que de la producción nacional; recordando que Bolivia tiene todos los pisos ecológicos para cultivar alimentos. No hubo inversión, ni apoyo técnico a los productores, todo lo contrario restricciones para producir, comercializar y exportar. En materia de derechos humanos, el Gobierno del Presidente Evo Morales está arrinconado, la brutal represión a los indígenas del Territorio Indígena Parque Isiboro Sécure (TIPNIS) el 25 de septiembre del año 2011 lo ha debilitado internacionalmente. La agresión y detención de hombres, mujeres y niños indígenas, la total parcialización de la justicia y la inexistencia de responsables ha desnudado el verdadero carácter represor del Gobierno. La muerte violenta en enfrentamientos de más de 60 compatriotas durante la gestión del Presidente Evo Morales, no ha sido aclarada hasta el momento, los caídos en Huanuni, en Cochabamba, en la Calancha, en Caranavi, en Pando, en Yapacaní, entre los más importantes. La existencia de más de 300 refugiados políticos en Brasil, la detención por más de tres años sin juicio del Gobernador de Pando, Leopoldo Fernández, y el pedido de asilo político del senador Pinto, jefe de la oposición en la Cámara de Senadores, son algunos de los ejemplos de la violación de los derechos humanos en Bolivia. En la lucha contra el narcotráfico, la situación está muy deteriorada. Los últimos operativos en dos poblaciones de Santa Cruz se han descubierto en 2 días 259 fábricas de droga, que producían 100 kilos de cocaína al día, lo que significa que cada día fabricaban más 25 toneladas. Se hace necesario recordar, que el año 2011 se decomisó 33 toneladas de cocaína, mientras que estas 259 fábricas descubiertas, producían en menos de 2 días la droga que se decomisó durante todo un año. Esta es una clara muestra del fracaso de la lucha contra el narcotráfico del Gobierno del Presidente Evo Morales. Por lo tanto, el tema propuesto por Bolivia, la defensa internacional de la hoja de coca, se verá opacado por los resultados de los últimos operativos antinarcóticos en el Departamento de Santa Cruz, que obligan a que el Gobierno de Evo Morales tenga que responder a varias preguntas que surgen lógicamente de esta situación. No se ha dado una explicación clara sobre las denuncias del Gral. Sanabria condenado por narcotráfico en los Estados Unidos, las denuncias del senador Roger Pinto, ahora asilado político en la Embajada del Brasil, la situación de varios militantes del MAS, partido de gobierno, que fueron acusados de narcotráfico, no se encuentran detenidos y las investigaciones avanzan muy lentamente. La 42ª Asamblea General de la OEA encuentra al Gobierno del Presidente Evo Morales en una situación muy crítica, aunque sus voceros quieran demostrar lo contrario.